Diana Sánchez, Psicoterapeuta por la Feap, Psicóloga colegiada y master oficial en sexologia. Realización de seminarios y talleres con Laura Guttman, Michel Odent entre otros. Además de formadora a nivel nacional en Educación para la salud sexual, para médicos, y enfermeros de atención primaria. Especialista en hipnosis, y Terapia de interacción recíproca (TIR). Próximamente también participaré como formadora en seminario de Doulas, con un seminario sobre Cesáreas y partos traumáticos y sus efectos psicologicos.
En los últimos años mi trabajo se esta centrando en el trabajo con madres, embarazo y puerperio. Desde que nació mi hija Valeria, mi vida profesional se ha venido centrando en el apoyo a las madres, y todo lo relacionado con el precioso y delicado mundo de la maternidad. Mi forma de trabajar es totalmente ecléctica, utilizando todas las técnicas que considero que para cada caso particular pueden ayudar a mejorar el proceso vital que la madre, o el padre estén atravesando. Pero principalmente utilizó la TIR, cuyas herramienta fundamental es la hipnosis, trabajamos fundamentalmente el vínculo afectivo, reconstruyendo si es necesario el vínculo dañado o construyendo una nueva base vincular sobre la que vivir con confianza y seguridad el hoy.
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El embarazo verdaderamente saludable para el bebé empieza por ser un embarazo feliz y placentero para una madre. Por ello, realizamos el seguimiento del embarazo con una filosofía de mínima intervención, evitando las limitaciones a la embarazada que no tengan fundamento científico. El parto en la especie humana tiene unos requisitos, en cuanto a condiciones emocionales, que es muy difícil se cumplan en un medio hospitalario. El hospital está para la enfermedad y no para la salud. El parto, como el comer, es un evento de salud. Fuera del hospital surgen menos complicaciones y, por ello, no solo es más gozoso para la madre y para el bebé, sino, además, más seguro en cuanto a morbimortalidad, como muestran todos los estudios científicos que lo han analizado. Por ello, el parto, cuando no hay factores de riesgo, puede ser fuera del hospital y eso es un derecho de la madre y del bebé.
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